El viernes 26 Fernando, Marcos, David, Susi y Yo pusimos rumbo a Madrid para dejarnos caer por uno de sus buques insignia: patones, y a pesar del chaparrón que nos cayó por el camino el sabado amaneció totalmente despejado. Después de desayunar y acompañados de nuestra amiga Susana nos encaminamos a "el pontón de la oliva" un impresionante muro de caliza plagado de vías se mire donde se mire.
Decidimos quedarnos en el sector "cielo líquido", suficiente para un dia, aunque el que más triunfo fue David.
El domingo decidimos echar un vistazo en "el cañón de Uceda" (donde por cierto es mejor que no dejéis el coche arriba junto a los casetos por que os pueden multar). Escogimos el sector "Antonio Martín", el más grande de esa zona y el más lleno de gente, bueno en algo tenia que notarse el Domingo y patones tenia que ser fiel a su fama de LLENO. Ese dia todos dejamos algo pendiente, hubo quien dejo algo más.
El mismo fin de semana Sara (que luego me riñe por que no la nombro), Ramajo y Luis decidieron llegarse hasta San Martín de Valdeiglesias una escuela deportiva situada a caballo entre las provincias de Avila y Madrid, dista unos 230km de Zamora y encontrarla no les fue tarea facil por la mala señalización y las malas indicaciones que llevaban. No es una "gran" escuela, pero seguro que para un fin de semana no dejara mal sabor de boca. Se ubica a los pies de un embalse, hay pinos para cobijarse a su sombra y fuente en el aparcamiento, que más se puede pedir.
La roca que encontrareis es una cuarzodiorita (que coño) fisuras y regletas en vías de grado medio, aunque hay algún sector como el callejón para los más avezados.
Puestos a conocer decidieron desplazarse a una escuela que tenía Luis en mente situada en la población toledana de Castillo de Bayuela.
Se encuentra a 286km de Zamora por Piedrahíta-Narros del Puerto (el camino más corto y recomendable). Segun Ramajo teniendo encuenta todos los aspectos la escuela merece un notable.
El lugar tiene aparcamiento, mesas y fuente a escasos quince minutos de los primeros sectores y se puede escalar a la sombra de los arboles en un gran numero de ellos. La roca es buena (granito o gneis) con aderencia lajas y regletillas.
La mayor parte de las vías son de entre 6a y 6c, aunque en el sector redil la cosa se pone dura. Ramajo cree que volvera y en más de una ocasión.