Alguien me dijo en una ocasión que para aprender hay que perder y eso es lo que nos ha pasado a David, Anibal y a mi en este puente de San Pedro en el Pais Vasco. Tras tener que cambiar el lugar de destino por amenaza de tormentas en Picos de Europa nos fuimos a Vascongadas, empezando la tournée en Eguino (provincia de Alava) donde aprendimos que a veces hay que perder el tiempo para descartar escuelas, que no por haber mucha roca tiene que haber muchas vías, y no por haber muchas vías estas tienen que ser buenas. No sabemos si por el exceso de humedad o de uso (nosotros apostamos por lo segundo) el tacto de la roca es resbaladizo lo que hace de la escalada algo desagradable y poco disfrutona, pero uno se crece ante la adversidad y esta te dice que pruebes suerte en otro lado. De modo que tras hacer una vía y debatir que hacer decidimos abandonar esta escuela que en nuestra opinión tuvo su momento de gloria en años pasados pero que ahora ha quedado obsoleta, salvo los sectores que se encuentran a la izquierda de la boca de la cueva Leze.
La segunda escuela que visitamos fue Santa Barbara, en la localidad de Hernani, que presenta el mismo problema que la anterior, aunque en esta ocasión Anibal y David sacaron algo mas en claro.
Nuestra siguiente parada: Atxarte. Situada en el parque de Urkiola (provincia de Vizcaya) es una de las escuelas más importantes y grandes del Pais Vasco y la que nos hizo recuperar el ánimo, pues el fin de semana largo empezaba a presentarse negro. Vias largas y caliza de buena calidad dieron paso a una tarde en la que hubo que esforzarse para ganarse las vías.
Por no querer darnos la pateada matutina al sector de la puerta, uno de los más recomendados de la zona, y no diponer de croquis de otros sectores decidimos cambiar de aires y hacer una visita a la escuela de Liendo, en el pueblo del mismo nombre, en Cantabria, lastima que una restricción por nidificación bajo amenaza de 600€ no nos dejara probar sus vías. ¿Y que se puede hacer en Cantabria si no te dejan escalar y tienes que volver a tu casa ese mismo día? Pues darte un baño en la playa y volverte a casa.
Quien más o quien menos todos hemos estado en recuevas y ahora puedo incluirme entre los que han estado en las tuerces. Cuando hace poco Santi me pregunto qué tipo de boulder es el que me gusta le respondí: "de cazos y desde sentado" y ese es el tipo de problemas que uno encuentra en esta zona palentina declarada espacio natural protejido. Un sinfín de arcos, muros verticales y desplomados y bloques de extrañas formas, plagados de agujeros hacen de este paraje el sitio ideal para la práctica de esta modalidad de escalada y un buen lugar para iniciarse.
